Evolución y creencias

EVOLUCIÓN Y CREENCIAS

¿Por qué crees que es importante la evolución del hombre? Bajo mi punto de vista, absolutamente egocéntrico, me planteo en primer lugar por qué es importante para mí la evolución del hombre.

Primero, porque soy hombre. Y segundo, ¿puede haber algo más importante para mí que mi propia evolución? Con esta pregunta no me queda otra que ir identificando y comparando conceptos que para mí sean importantes, es decir, que formen parte de mis propios valores. En mi caso particular mi razonamiento, más o menos acertado, me indica que, si quiero ayudar a otras personas, cuanto más evolucionado esté más y mejor les podré ayudar.

El ejercicio de la búsqueda y priorización de mis valores personales pronto llega a otra pregunta más profunda ¿Cuál es el sentido de mi vida? Y esto no tiene nada que ver con ser hombre o mujer, aquí estamos todos implicados.

El sentido de nuestra vida depende fundamentalmente de nuestro sistema de creencias. Desde la antigüedad, y hasta el día de hoy, el sistema de creencias es impuesto por los gobernantes y religiones. Sin embargo siempre ha habido librepensadores, los denominados herejes, que han sido perseguidos, torturados y aniquilados de múltiples maneras. Nosotros ahora tenemos una falsa sensación de libertad mientras nuestro sistema de creencias sigue siendo manipulado.

Si quiero ser un ser humano libre, en primer lugar he de convertirme en un librepensador, y para ello debo saber crear y gestionar mi propio sistema de creencias. ¿Cómo puedo hacer esto? Te comparto ahora las bases de mi sistema de creencias, con el único objetivo de que tú crees y gestiones el tuyo propio.

Mi sistema de creencias está basado en tres pilares fundamentales:

En primer lugar, mi sistema de creencias es propio. Al más original y puro estilo teosófico, en que cada uno crea su sistema de creencias y respeta los sistemas de creencias ajenos. Por lo tanto no lo impongo y no espero que alguien tenga mi mismo sistema de creencias sino que más bien lo normal es que difieran. Esto también significa que yo decido si lo comparto o no y con quien. Cualquier obligación a comunicar mi sistema de creencias la considero una imposición y una falta a mi propia libertad personal.

 

Es segundo pilar es que mi sistema de creencias ha de estar libre de prejuicios y códigos pre-establecidos, y esto supone un arduo trabajo, sobre todo al principio. En mi caso, yo he nacido en España y he sido criado en la sociedad española y con la religión cristiana católica. Interesarme por otras religiones y culturas (por ejemplo he leído la Biblia, sí, y también el Corán, y el Bhagavad-Gita). Esto facilita mi apertura mental a otras ideas y con ello la comprensión y la eliminación de prejuicios impuestos, que he ido y sigo eliminando conforme voy dándome cuenta y comprendiendo. ¿Implica esto que yo deje de ser cristiano? No necesariamente, pero desde luego ya no como creencia impuesta.

Y luego están los códigos pre-establecidos. En la actualidad todavía no tienen un sustento científico sólido como para denominarles códigos genéticos, pero parece que la genética no solo está afectando a nuestro cuerpo físico, sino también a otras cosas insospechadas. Un ejemplo verídico es el de un niño que, hace algunas décadas, tiene un accidente y se amputa un dedo. El niño se hace mayor, se casas y tiene varias hijas. Casualmente una de ellas tiene un accidente y se amputa un dedo. Es una casualidad cuestionable.

Otro ejemplo: hace casi un siglo un hombre está ahorrando dinero con mucha esfuerzo y lo esconde para comprar una casa con su huerto. Un día va a buscar su dinero y se lo han robado. Este hombre tiene familia e historias similares se repiten con algunos de sus hijos e incluso nietos. Estos códigos pre-establecidos pueden llamarse también patrones o transgeneracional, no sabemos hasta dónde pueden llegar y, desde luego, hemos de limpiarlos también.

El tercer pilar de mi sistema de creencias es romper el sistema de creencias. Es decir, ya no va a ser un sistema de creencias, va a ser mi sistema de certezas subjetivas. ¿Cómo podemos hacer esto? Para ello hemos de tratarlo como si fuera una ciencia.

Una de las formas de actuar de la ciencia es observar un acontecimiento, estudiarlo, analizarlo, asimilarlo a un procedimiento, concepto o fórmula, y reproducirlo según estos últimos. Si la reproducción es exitosa comienza a considerarlo y admitirlo como ciencia. Sin embargo, más tarde otro científico puede invalidar esta solución al intentar aplicarlo en condiciones diferentes. Esto conlleva una mejora y actualización de la fórmula inicial que ahora funcionaría también es esas otras condiciones.

Volviendo al tema de la religión ahora ya no tengo muchas creencias sino unas pocas certezas subjetivas que evolucionan redefiniéndose con mayor precisión basadas en mis propias vivencias y percepciones.

Por lo tanto se puede decir que, mi sistema de creencias evoluciona hacia mi propio sistema de certezas subjetivas, basadas en mis experiencias y percepciones. Cualquier nueva idea o intento de nueva creencia queda en una inmensa sala de espera hasta que tenga cumpla los requisitos para entrar completa o parcialmente, o ser rechazada.